Según un estudio realizado por Bancaja y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas –IVIE- la edad a la que los jóvenes valencianos se emancipan se ha adelantado ligeramente. De un 48% de jóvenes con 28 años que en 1999 seguía viviendo en casa de sus padres, se ha pasado a un 33% de jóvenes de la misma edad que todavía no han abandonado el hogar paterno en 2005. Sin embargo, cabe señalar que los jóvenes valencianos siguen emancipándose mucho más tarde que los jóvenes de otros países europeos.
El estudio destaca que los universitarios son los que más tardan en irse de casa. A los 30 años, cerca del 40% de los universitarios todavía vive con sus padres en la Comunidad Valenciana.
El observatorio de la Inserción Laboral Bancaja-IVIE, además, ha analizado también la edad a la que los jóvenes formalizan una pareja, indicando que ésta se ha retrasado considerablemente. En 1996 en la Comunidad Valenciana, el 33% de los jóvenes de 30 años permanecía soltero, mientras que en 2005 esta cifra ha ascendido al 73%.
El retraso en la edad de formalizar pareja repercute, según indica el estudio, en el hecho de que los jóvenes tarden cada vez más en tener hijos. En 2005 a los 30 años el 86% de los jóvenes no tenía hijos. Asimismo, se observa que cuanto mayor es el nivel de estudios, más tarde se produce la decisión de tener un primer hijo.
El estudio concluye que las dificultades a las que se enfrentan los jóvenes en el mercado de la vivienda pueden ser la razón que retrasa la edad en la que los jóvenes entran en la vida adulta, es decir, abandonan el hogar paterno, formalizan una pareja y tienen hijos.
Este trabajo corresponde al cuaderno 71 del Proyecto «Capital Humano» que Bancaja realiza junto con el IVIE. En él se analizan los eventos vitales que experimentan los jóvenes en la transición a la vida adulta, tomando como referencia los resultados obtenidos de diferentes oleadas en la Comunidad Valenciana, y su comparación con una muestra representativa de municipios españoles de más de 50.000 habitantes.
