El presidente de Fundación Bancaja, Rafael Alcón, y el presidente de Fundación ÉTNOR, Enrique Belenguer, han renovado el convenio de colaboración entre ambas instituciones para desarrollar programas de promoción de la ética y la responsabilidad en la empresa. La colaboración tiene como elemento central la celebración de una nueva edición del Seminario Permanente de Ética Económica y Empresarial, que este año celebra su vigésimo octava edición bajo el lema Desafíos éticos para la empresa en un mundo digital. El seminario, con una programación de nueve conferencias, se desarrollará de octubre de 2018 a junio de 2019 en la sede de la Fundación Bancaja.
La sesión inaugural del Seminario Permanente de Ética Económica y Empresarial tendrá lugar el próximo lunes 22 de octubre y correrá a cargo de Adela Cortina, catedrática de Ética por la Universitat de València y directora de la Fundación Étnor. La conferencia de noviembre será impartida por Andrés Pedreño, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Alicante y co-fundador y presidente de IT&IS, LAB experimental que agrupa startups digitales, quien hablará del impacto de la digitalización en la empresa y la sociedad, mientras que en diciembre se celebrará una mesa redonda sobre robotización y su repercusión en el empleo y las personas con la participación de un representante de la multinacional Ford y Eugenio Mallol, director editorial de Innovadores by Inndux, primera plataforma de información sobre innovación. El seminario continuará en 2019 con la intervención de ponentes como el economista Rafael Pinilla, el empresario Miguel Juan, y el periodista y empresario, Juan Luis Cebrián, entre otros.
Junto a la celebración del seminario, ambas instituciones realizarán talleres, encuentros y jornadas empresariales para facilitar la difusión del valor de la ética en la gestión de empresas y organizaciones. La Fundación ÉTNOR es una organización sin ánimo de lucro que nace en 1991 con el fin de promover el reconocimiento, difusión y respeto de los valores éticos implícitos en la actividad económica y en la calidad de las organizaciones e instituciones públicas y privadas, con el objetivo de conseguir organizaciones que apuesten por una gestión ética de su actividad y por la perdurabilidad del proyecto empresarial a largo plazo.
