El fotógrafo valenciano Alberto Pla y la organización de la sociedad civil TECHO, con la colaboración de la Fundación Bancaja, presentan la exposición ‘El Corazón de Haití’, una muestra que permanecerá abierta al público en el Centro Cultural Bancaja hasta el 11 de marzo y que reúne una selección de fotografías y un documental sobre la lucha diaria del pueblo haitiano.
Hablamos con Jean Donald Dorélus, subdirector de TECHO Haití, quien nos cuenta la labor que realiza la organización, que involucra alrededor de 200 voluntarios repartidos en varios proyectos educativos, sanitarios y agrícolas, entre otros.
- ¿Cuál es objetivo de vuestra organización?
Nuestro objetivo es trabajar para conseguir una sociedad justa y sin pobreza, donde todas las personas tengan las oportunidades para desarrollar sus capacidades y puedan ejercer y gozar plenamente sus derechos. Para lograrlo, trabajamos sin descanso en los asentamientos precarios para superar la pobreza, a través de la formación y la acción conjunta de sus pobladores y jóvenes voluntarios, promoviendo el desarrollo comunitario, denunciando la situación en la que viven las comunidades más excluidas e incidiendo junto a otros en política.
- ¿Qué papel tienen para TECHO los voluntarios?
Los voluntarios tenemos mucha importancia para la institución, ya que trabajamos junto con las familias, y con la población juvenil, y somos los que podemos hacer muchas cosas, tenemos muchas ventajas a favor como por ejemplo la edad, una oportunidad académica, los centros de estudios y de debates o la idea de trabajar con los jóvenes universitarios y profesionales para generar conciencia sobre la realidad y poder actuar. Somos los futuros líderes de familias, de empresas de gobiernos etc.
- Tras el terremoto de 2010, ¿qué se ha hecho y qué queda por hacer en Haití?
Se han hecho muchas cosas, desde la ayuda directa con ropa o comida hasta los proyectos más concretos como lo son los acompañamientos a los habitantes en programas que permitan un verdadero desarrollo de las comunidades o la creación de una escuela de cursos técnicos para poder asegurar una inserción laboral.
- ¿Cómo surge el proyecto ‘El Corazón de Haití?
Alberto Pla, este joven fotógrafo, tiene como objetivo desde hace casi 4 años mostrar muchas cosas positivas que no aparecen en los noticieros internacionales. Un día, navegando por la web, vió el trabajo que hacemos los jóvenes voluntarios en Haití y demás países latinoamericanos y decidió ser voluntario y se puso en contacto con nosotros. Al final de las conversaciones nos pusimos de acuerdo sobre el proyecto. La idea es mostrar el trabajo de los jóvenes voluntarios haitianos trabajando por superar la pobreza y poder captar a más voluntarios e involucrar a más sectores de la sociedad.
- Las fotografías de Alberto Pla sobre este proyecto se presentan por primera vez aquí en Valencia, en el Centro Cultural Bancaja. ¿Dónde se mostrarán cuando acabe esta exposición?
La idea es seguir rotando con la exposición a lo largo de los países europeos ya que tenemos una oficina en Londres para todo el continente, siempre y cuando encontremos instituciones acreditadas y validadas por la población, que se involucren con la sociedad, que trabajan la Responsabilidad Social empresarial (RSE), tal y como hace la Fundación Bancaja. En cuantas más ciudades podamos mostrar la exposición, a más voluntarios llegaremos.
