Picasso. El Contemplador Activo

Bancaja presenta en el Centre d’Art Taller d’Ivars del Ayuntamiento de Benissa la exposición Picasso. El contemplador activo. Colección Bancaja, la séptima serie de grabados del artista malagueño que la Entidad incorporó a su colección, en septiembre de 2005. Bancaja es la entidad privada del mundo con mayor obra gráfica del artista  malagueño con unos fondos de aproximadamente 1.700 grabado.

La exposición, comisariada por Juan Carrete y que permanecerá expuesta al público desde el viernes 26 de marzo hasta el viernes 23 de abril de 2010, muestra 60 estampas realizadas por Pablo Picasso entre el 27 de agosto de 1966 al 15 de enero de 1968 y que tratan diversos temas como el teatro, el erotismo indiscreto, las penalidades de la vejez, el circo o la amistad. Son obras impregnadas de un soterrada tristeza y nostalgia del artista que sólo se siente observador, no como un ‘voyeur’ pasivo sino como un contemplador activo. Picasso muestra una melancolía más llena de humor que de amargura.

La presente exposición presenta las sesenta estampas procedentes de otras tantas láminas de cobre grabadas, que se encontraban en el taller de Crommelynck a la muerte de Picasso. Después de ser aceradas y biseladas, fueron estampadas por Crommelynck entre 1975 y 1977, tirándose cincuenta estampas, numeradas del 1/50 a 50/50, más quince estampas de artista numeradas EA I/XV a XV/XV, todas ellas sobre papel avitelado Rives.

Fueron editadas por la galería Louise Leiris en 1981, sellándose con tinta cada una de las estampas con un sello que reproduce la firma de Picasso. Bancaja posee las sesenta estampas del número 29/50, adquiridas directamente a la Galería Louise Leiris en el año 2005.

Con la exposición Picasso. El contemplador activo (1955-1960), Bancaja, entidad privada propietaria de la mayor colección de obra gráfica de Picasso, vuelve a exponer al público los fondos propios del artista malagueño. El compromiso de Bancaja con la obra de Picasso se inicia en 1994 con la adquisición de la Suite Vollard, compuesta por 100 grabados realizados entre 1930 y 1937. En la actualidad, entre los fondos de obra de Picasso incluidos en la Colección Bancaja figuran otras relevantes series como Suite Vollard, Suite 156, Suite 347, Caja de Remordimientos, Retratos de Familia y los Fumadores o Suite 60. Otras piezas clave de obra de Picasso propiedad de Bancaja son los linograbados y la colección de más de un centenar de libros ilustrados.

La finalidad de esta colección, junto a la labor de recuperación de patrimonio artístico, es la divulgación cultural. Por ese motivo, Bancaja ha expuesto sus fondos de obra gráfica de Picasso a través de 150 exposiciones desde que en 1994 iniciara la adquisición de obra de Picasso. Estas muestras, por las que han pasado casi 2,3 millones de personas en estos 16 años, se han celebrado en España, pero también en países como Estados Unidos, México, Brasil, Cuba, Puerto Rico, República Dominicana, Holanda, Alemania, Italia, Portugal, Grecia, Hungría o Corea del Sur.

Teatro y erotismo

Es desconocida la razón por las que Picasso fuera relegando la publicación de estos grabados. Algunos estudiosos de su obra han supuesto que el deseo de Picasso era restringir al máximo el número de estampas que se publicaran, pero este supuesto se contradice con la edición y publicación de la llamada Suite 347, realizada en 1968 y editada y expuesta en diciembre del mismo año, mientras que parte de los grabados de 1966 y 1967 permanecían sin estampar y por lo tanto ocultos al público. Posiblemente la causa fuera un voluntario olvido de los cobres en el taller de Crommelynck y el que no hubiera un encargo lo suficientemente atractivo para publicarlas.

Un aspecto circunstancial a tener en cuenta para explicar el reiterado tema del teatro en los grabados de esta serie es la actualidad inesperada que tuvo la obra de teatro de Picasso, publicada en París por el propio autor el año 1941, “Le désir attrapé par la queue”. Jean-Jacques Lebel, artista y escritor, la presentó en el festival de libre expresión en Ramatuelle (Francia) en 1967.

En el conjunto de las estampas está omnipresente el mundo del erotismo picassiano, de su vejez y el hecho de pintar, siempre representado en estratos superpuestos, los sátiros-hombres-falos, Aristófanes y el vaudeville, la tragedia instintiva y la naturaleza humana, el teatro de sombras y el cabaret.

El contemplador activo
Desde noviembre del año 1965 hasta diciembre de 1966, Picasso dibuja y graba, pero no hace ninguna pintura. El artista, desde el 27 de agosto de 1966 hasta el 15 enero de 1968, con ochenta y cuatro años, hace ciento dieciséis grabados, contando siempre con los técnicos y estampadores Piero y Aldo Crommelynck. En todos ellos trabaja con total libertad, y sin que exista un tema propuesto. Únicamente encontramos algunos grabados en que se ciñe al compromiso de hacer una ilustración en concreto para una obra determinada.

El resto de los libros en que se incluyeron estampas de esta época como Doble ensayo sobre Picasso, Barcelona, 1968 o El entierro del Conde de Orgaz, Barcelona, 1969 forman un conjunto unitario y se incluyen en los libros no como ilustraciones ad hoc para los textos, sino exclusivamente con la idea de enriquecerlos, utilizando estampas del conjunto de planchas grabadas que ya tenía realizadas.

Esta exposición está acompañada por un catálogo de casi 200 páginas editado por la Fundación Bancaja con motivo de la primera exposición de El Contemplador Activo en 2005. A la vez, se han puesto a disposición del público un cartel-folleto explicativo de la exposición de distribución gratuita. La entrada a la exposición es libre y gratuita.