El Premio Fundación por la Justicia-Fundación Bancaja reconoce la trayectoria y dedicación constante de aquellas personas u organizaciones que destacan por su aporte a la promoción y defensa de los derechos humanos.
Este año el Jurado destaca el compromiso durante más de 25 años con los desposeídos de Haití de Richard Frechette. Sacerdote católico, se hizo médico al llegar al país caribeño y ver las enormes necesidades sanitarias en la zona, donde puso en marcha el hospital pediátrico St. Damien, de referencia en el país y que llega a tratar 80.000 pacientes al año.
Haití es casi un estado fallido en que el acceso a servicios públicos, salud, educación, etc. es casi nulo, y donde el tiempo se detuvo a raíz del devastador terremoto sufrido el 12 de enero de 2010, pues apenas se ha reconstruido nada desde entonces. El paisaje de Puerto Príncipe es una sucesión de ruinas por las que la gente deambula a la búsqueda de su sustento diario.
En medio de tanta desolación, la titánica tarea de Richard Frechette y su organización, Nuestros Pequeños Hermanos, supone un soplo de esperanza que alcanza a casi 1.000.000 personas en alguno de los diversos programas educativos, sanitarios, de promoción del empleo o de amparo humanitario que realizan. Pero su máximo compromiso es con los 600 niños y niñas huérfanos, abandonados a su suerte y que encuentran un espacio de esperanza y futuro en los hogares de Kerscoff y Tabarre.
El Jurado, presidido por el último galardonado, Fundación MAIDES, y formado por Jose Mª Tomás, presidente de la Fundación por la Justicia, Vicente Montesinos, vicepresidente de la Fundación Bancaja, Ximo Puig, Secretario General del PSPV-PSOE, Aurelio Martínez y Manuel Ferrer, patronos de la Fundación por la Justicia, Isabel Rubio, gerente de la Fundación Bancaja, Jose Alfonso Soria, Vicepresidente del Tribunal de las Aguas de Valencia, Vicente Berenguer y Josep Boades, por parte del Servicio Jesuita a Refugiados, anteriores premiados, Miguel Falomir, Secretario del Jurado; ha tenido una ardua tarea para elegir una de entre las 22 candidaturas presentadas, todas ellas con méritos suficientes para la obtención del premio.
El premio, con una dotación económica de 10.000€, fue concedido por vez primera en 1995 a Adolfo Suárez, y en ediciones sucesivas ha reconocido la labor del Tribunal de las Aguas de la Vega de Valencia, la Asociación de Víctimas del Terrorismo, la Asociación Pro-Búsqueda de Niños y Niñas Desaparecidos de El Salvador, el profesor Muhammad Yunus, Dña. Bogaletch Gebre, el Padre Vicente Berenguer, el Doctor Pedro Cavadas, Misioneras de la Caridad, el Servicio Jesuita a Refugiados y MAIDES.
